El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Granada ha alzado la voz contra el proyecto de construcción de una planta fotovoltaica de 30.000 metros cuadrados en el entorno de El Fargue, que cuenta con el respaldo de la Junta de Andalucía y del propio Consistorio.
Según denunció el portavoz socialista Paco Cuenca tras una reunión urgente con los vecinos del barrio, “el daño que provocará la autorización de la Junta y del Ayuntamiento para ocupar los valles entre el distrito Albaicín y el Darro, con 30.000 metros cuadrados de paneles de espejos, es incalculable y una aberración para Granada”.
Cuenca también ha recordado que los terrenos afectados “entraban en un plan de protección de la zona búfer de la Alhambra que el PP ha metido en cajón” y que “será visible desde el propio Llano de la Perdiz”.
Los socialistas han pedido a la alcaldesa Marifrán Carazo que actúe con responsabilidad para “proteger el patrimonio medioambiental e histórico, tras hacerse público además que en la zona hay restos valiosos de construcciones de la época Zirí”.
Durante la reunión con los residentes de El Fargue, estos trasladaron al grupo municipal su creciente preocupación “por el desamparo que están encontrando en el gobierno de Carazo”.
Cuenca ha denunciado que el proyecto “ha sido diseccionado en tres subproyectos para saltarse los permisos del Gobierno de España que establece límites muy claros por debajo de los 50 megavatios”, y ha lamentado la falta de reacción por parte del Ayuntamiento.
El portavoz no ha dudado en calificar la operación como “una auténtica aberración”, señalando que las vistas desde lugares emblemáticos como el Llano de la Perdiz se verán “pervertir por esta nueva forma de especulación, cambiando laderas verdes de olivos centenarios por valles de espejos que van a modificar la fisionomía del paisaje de una manera brutal, mientras la señora Carazo no dice nada y mira hacia otro lado”.
Asimismo, Cuenca ha subrayado que la postura de su grupo es firme: “es de clara defensa a los intereses del distrito, pero también a los intereses de nuestra ciudad ante un proyecto que consideramos un atentado en toda regla a Granada, y que supone y ataque directo contra vecinos y vecinas a los que les van a instalar enjambres de placas solares a 90 metros de sus casas, que serían inasumibles en el Zaidín, en Ronda o en La Chana”.
En su intervención, Cuenca ha criticado directamente al presidente andaluz: “No damos crédito a que Moreno Bonilla haya podido autorizar este proyecto que supone un atentado también patrimonial, porque está en la zona buffer de influencia de la Alhambra, pero que además supone un peligro para todos los granadinos y granadinas por su impacto en los barrancos que desembocan en el Darro, ya que se prevé arrancar centenares de olivos”.
Ha dejado clara la posición de su grupo respecto al desarrollo energético: “sí a las energías renovables, pero no en este entorno que además está protegido. No se pueden implantar espacios de generación de energía renovable o grandes fotovoltaicas en lugares donde vive la gente, en lugares donde hay una afección a la Alhambra, en entornos donde hay indicios de restos arqueológicos, pero sobre todo no les puedes plantar a los vecinos y vecinas un parque de 30.000 metros cuadrados de espejos delante de sus casas”.
Y ha rematado con una crítica al silencio institucional: “Cualquier persona que suba el Fargue y conozca el proyecto se echaría las manos a la cabeza, y nos sorprende el silencio cómplice de Carazo ante la decisión de la Junta que parece responder a intereses especulativos más que a la búsqueda de energías renovables, que se pueden ubicar en espacios donde el impacto no sea de estas características”.
Para finalizar, Cuenca ha informado que su grupo “ha realizado alegaciones al proyecto para que se detenga de inmediato” y ha asegurado que “el grupo socialista no va a dejar solos a los vecinos y seguirá trabajando para detener esta aberración a través de iniciativas al pleno y demás acciones”.
