El Real Jaén consiguió sumar un meritorio punto a domicilio y ante un rival de su Liga en un partido muy peleado y poco vistoso para el espectador. La balona mejoró bastante en la parcela defensiva y sufrió muy poco ante un Real Jaén romo en ataque y en la elaboración. El equipo visitante jugó sus mejores minutos en el tramo final de la primera parte. Los jienenses no sufrieron tampoco demasiado atrás pero sí cabe decir que fueron los locales quienes generaron más y mejores ocasiones para marcar gol.
El partido comenzó con claro dominio de la balona, con un Carlos Selfa muy inspirado dominando la parcela ancha y sabiendo distibuir el juego de su equipo. Tanto es así antes de cumplirse el minuto diez los locales ya habían generado hasta cuatro ocasiones de claro peligro. La primera de ellas en una falta lateral botada por Zamorano que Mauri cabeceó rozando la cepa del palo de Felipe Ramos. En el minuto siete la presión de Francis Ferrón da sus frutos y le permite robar un balón para asistir de nuevo al brasileño, que se adentra en el área de forma punzante y suelta un disparo que vuelve a atajar el guardameta visitante.
El conjunto jienense tenía demasiadas dificultades para salir con la pelota controlada y sólo la veteranía de Óscar Quesada daba algo de fiabilidad en el pase a los de Ramón tejada. En el minuto ocho en otra rápida acción de los locales Juampe condujo desde fuera hacia dentro hasta conectar un disparo demasiado alto finalmente. La siguiente llegaba en el doce con un córner ensayado que acabó con cabezazo de Carlos Selfa desviado. El juego de la Balompédica Linense era de toque pero se apoyaba poco en las bandas. A los veinte minutos sí funcionó la entrada por la banda izquierda en una juagada de Rulo con centro al segundo palo que Mauri remató flojo a las manos del portero cuando Juampe entraba por detrás con mayor fuerza.
Cuando el partido se aproximaba a la media hora todo cambió y ambos equipos cambiaron sus palpeles, el Real Jaén pasó a controlar el juego y la pelota por completo y ahora a la balona le costaba un mundo dar tres pases seguidos sin perderla. No obstante el dominio visitante no se tradujo en ocasiones claras ante la portería de Óscar Santiago, que solo tuvo que intervenir por alto y en las jugadas a balón parado.
La segunda parte fue mucho más abierta y sin un dominador claro, además de que hubo llegadas de peligro en ambas áreas. El primero que se acercó con peligro fue le local Juampe en una acción en diagonal desde la banda que finalizó con un disparo ajustado que rozó el palo. La ocasión más clara se vería pasada la hora de partido con un rápido contragolpe de la balona y un pase interior de Canario muy bueno que permitió a Zamorano plantarse dentro del área en ventaja, pero en su intento de centrar al segundo palo el balón golpeó el Mario desviando su trayectoria, sin embargo Felipe metió una mano salvadora rectificando su posición inicial. Una parada de mucho mérito. Por parte visitante la mejor opción para romper el cero a cero llegó en un lanzamiento de falta directa de Santi Villa en el setenta y uno que el portero local Óscar Santiago sacó de su escuadra enviándola a la esquina. En el tramo final del choque el Real Jaén pareció dar el resultado por bueno y cedió el balón y la iniciativa a la Balompédica Linense, que tuvo hasta tres llegadas bastante claras en las que no supo definir. La entrada de Canario dio más brío a los locales y un centro supo permitió a Juampe recortar a su par en la frontal y tras chutar encontrarse con la buena parada de Felipe. El propio Canario en el ochenta y seis probó fortuna en solitario y tras sortear a dos rivales que le salieron al paso, pero mandó su lanzamiento por encima delarguero. Con el noventa ya rebasado una genialidad de Stoichkov por banda izquierda permitió a Canario un nuevo remate desde el área pequeña, pero Mario se interpuso entre su lanzamiento y la portería in extremis y la sacó a córner.
