El PSOE ha ratificado esta semana a Irene García como secretaria general del PSOE provincial tras confirmar que ha sido la única candidata que ha superado el mínimo de avales exigido y desestimar los recursos planteados por los demás candidatos al desarrollo del proceso. Su nueva ejecutiva saldrá elegida en el congreso provincial que se celebrará el próximo 21 de octubre, al que se presentará con el bagaje de cinco años de liderazgo en los que asegura haber renovado la imagen del partido y haber sentado las bases de cara a un futuro sobre el que ahora tienen que pronunciarse a su vez las agrupaciones locales. Tiene al respecto bastante trabajo por delante, y lo reconoce en una entrevista en la que también aborda su labor como presidenta de la Diputación. Con menos de dos años por delante, apunta a la creación de empleo, el mantenimiento de los servicios públicos, la mejora de las infraestructuras y la consolidación del sector turístico como grandes claves, sin olvidar las tensiones con el Gobierno central y con el PP ante cuestiones como la ITI o los nuevos PGE.
Su proclamación oficial como secretaria general se conoció este jueves, después de un proceso de recogida de avales en el que ha demostrado todo su músculo. “Lo hemos vivido con toda la pasión, ha sido el más participativo, con más del 85% del censo del partido, y me siento muy agradecida con los apoyos que he recibido para continuar la labor iniciada hace cinco años, donde sí vivimos un congreso muy dividido y en el que ganamos por poco más de 40 votos. Ahora estamos en otra situación, desde la unidad y el apoyo de los compañeros, y de momento sólo hemos elegido a la secretaria general, ahora hay que seguir adelante con el proceso”.
Y ese proceso pasa en primer lugar por el congreso provincial del día 21 y, posteriormente, por los congresos locales. “Hay que esforzarse para hacer un gran congreso entre todos, no sólo los que han avalado mi candidatura, de manera que el 21 de octubre salga elegida una dirección fuerte, unida y con el único reto de seguir cambiando este partido. Desde la celebración del congreso federal se ha publicado demasiada inquina interna, pero salimos reforzados de un proceso en el que no queda otra que seguir adelante a través de la senda de la unidad. Yo por mi parte lo hice desde el primer día. Luego ha venido un magnífico congreso regional y eso mismo deseo al provincial”.
De cara a los congresos locales, “pido lo mismo que hemos hecho nosotros a nivel provincial. Primero responsabilidad. Es cierto que todos los procesos internos generan nerviosismo, es una aspiración legítima presentarse para liderar un proyecto, pero pido responsabilidad y diálogo. En este partido no sobra nadie y tenemos que volver a ilusionar a muchos que están fuera para que se vengan. En cinco años hemos hecho una renovación importante del partido. Mirad cinco años atrás quiénes eran los líderes del partido y quiénes lo son ahora, en su mayoría nuevos y jóvenes, con una nueva forma y talante distinto, y eso hay que aprovecharlo”. Asimismo, Irene García subraya otra clave: “No tiene por qué ser el líder del partido el alcalde. En unos sitios funciona y en otros no. En Chiclana nunca lo ha liderado el alcalde y nos da mayorías absolutas. Fui alcaldesa y no era secretaria general. Lo que tengo claro es que los partidos tienen que ser capaces y apoyar los gobiernos donde estamos. Eso es una responsabilidad muy importante. Y yo siempre voy a apoyar a cada alcalde en su labor, pero no hay regla matemática para que quien sea alcalde tiene que ser secretario general”.
“Que va a haber tensiones locales, no tengo dudas. Pero mi misión es reducir esa tensión, sobre todo en los grandes. Lo que pido son candidaturas fuertes, donde gobernamos porque sí y donde no porque queremos hacerlo. Odio los bandos, las cuotas, las familias, por eso me presenté hace cinco años, y me dejaré la piel para que no sea así”, recalca, aunque matiza que eso no significa que haya “enterrado ninguna década. Me siento orgullosa de la gente que ha formado parte de este partido. La cordialidad y el diálogo debe partir de quien lidera el proyecto, y creo que ha habido generosidad por mi parte y la he encontrado en personas que no se sentían identificados al principio con mi proyecto”.
Pero, a un lado la cuestión interna del PSOE, Irene García también debe responder sobre su gestión pública como presidenta de la Diputación. Tras más de dos años al frente de la institución, asegura ser “muy crítica y exigente con lo que hacemos, pero también es necesario tener presente de dónde venimos. La Diputación tenía que recuperar su relevancia, porque no entendía que en plena crisis, con una institución saneada, se le negara a la provincia la oportunidad de acciones concretas con ayuntamientos y empresas para construir presente más positivo. Cuando llegamos al gobierno la EPA nos hablaban de cifras muy preocupantes. La última dice que unas 80.000 personas han salido del desempleo desde entonces, con 13 puntos menos de tasa de paro, y eso abre un horizonte de optimismo. También se ve en el crecimiento económico y empresarial. Hemos creado un plan estratégico para apoyar iniciativas que generen empleo en la provincia, y se ha visto que podemos construir para salir al exterior y crear mayor volumen económico”.
En ello está desempeñando un papel determinante el sector turístico, pese a que en el pasado mes de agosto no haya sido capaz de frenar un nuevo incremento del paro: “Todavía hay mucho por hacer. No hemos superado aún la brecha de la estacionalidad en el empleo que genera. El Patronato tiene claro que debe trabajar en colaboración con las empresas del sector, e ir de su mano para generar iniciativas que den oferta turística todo el año, y, además, hacer una apuesta positiva para atraer más turistas en las épocas en las que tenemos menos visitas, a través del atractivo gastronómico, deportivo o del turismo rural. Otra apuesta clave es la del aeropuerto de Jerez y la del puerto de Cádiz. En el caso del puerto queremos consolidarlo como puerto base para la llegada de cruceros, para que no sea solo lugar de escala, sino de permanencia, y hay que seguir trabajando en esa cuestión. El aeropuerto, por su parte, aún no ha dado de por sí la potencialidad que podría generar desde el turismo. El año pasado nos reunimos con grandes empresas del sector, que ya nos trasladaron su confianza de abrir nuevas líneas de manera regular en épocas del año que no son de crecimiento turístico en la provincia, y nuestro acuerdo permitió que se establecieran ya algunos de esos vuelos, lo que ha permitido que hoteles de la provincia no cierren en meses de invierno”.
Pero el desarrollo económico de la provincia pasa por otros sectores y precisa, además, de otras vías de desarrollo, que en muchos casos pasan por la mejora en las infraestructuras: “Estamos en una provincia llena de oportunidades, con elementos suficientes para poder competir, pero es verdad que tenemos una merma de infraestructuras, ya que no hemos sabido encontrar la complicidad del gobierno de España y la sensibilidad con otras fuerzas políticas para compartir esta realidad y conseguir sus apoyos. Estamos de nuevo en un momento clave, sobre todo de cara al inicio del debate de los PGE de 2018, y la provincia tiene ya que saldar las deudas que tiene el Gobierno con ella. El caso del aeropuerto, por ejemplo, que tiene que ser ampliado, con nuevas características, para recibir mayores vuelos que incrementarían la afluencia. O el de la Algeciras-Bobadilla, cuya falta de apoyo se está convirtiendo en un freno para la provincia y para Andalucía. Eso es competir en desigualdad, como ha ocurrido también con el timo del desdoble de la Vejer-Tarifa, que ya no es inicio de obras, sino redacción de nuevo, y retraso de año y medio para ver el primer ladrillo. No es cierto que no tengamos oportunidades de querer crecer, sino que por desgracia hemos encontrado la asfixia de otras instituciones, y poco compromiso para que eso cambie”.
Y dentro de las aspiraciones de crecimiento entra la oportunidad de los fondos ITI, cuyo desarrollo empieza a despertar cierto pesimismo en la propia presidenta: “Tengo una preocupación real., ya que, desgraciadamented la ejecución de esos fondos está paralizada y parece que vamos a volver a repetir los errores del pasado. Estoy preocupada porque he vuelto a conocer la intención del delegado del Gobierno de Andalucía de crear una oficina similar a la que ya gestiona la Diputación en estos momentos. Eso no lo entiende ningún ciudadano. No se entiende que teniendo esa dotación extraordinaria, que va a servir para crear empleo, y que teniendo unos fondos que van a ir directamente a las empresas para que inviertan en empleo, en tecnología, tras convencer a la Junta, al Gobierno y a Europa... no podemos llegar otra vez a la provincia a pelearnos”.
Cuestiones en las que lamenta asimismo el papel que está desempeñando el PP, al que critica que aliente movilizaciones como la del hospital de La Línea, pese a que ya tiene fecha de apertura. “Es una reivindicación engañosa y maliciosa, porque va a abrir sus puertas en unos días. No vale utilizar cualquier artimaña política para engañar a los ciudadanos con algo tan sensible como la sanidad. Lo que más le duele al PP es que vayamos a contar con un hospital como éste para La Línea, de primer nivel. Pido al PP responsabilidad ante este tipo de cuestiones, porque además está ejerciendo una oposición muy pobre.Saben cómo funciona la institución, y desgraciadamente se quedan en la anécdota”.
Salvo del caso del PA, García tampoco tiene muy buena impresión de la labor que están realizando las demás fuerzas de la oposición. “Las marcas blancas de Podemos han significado nada o muy poco al crecimiento de esta provincia. No conocemos ninguna de las grandes propuestas que iban a hacer para cambiar la política y transformar la realidad de los ciudadanos, y la comparativa la tenemos a día de hoy. Diputación lidera los apoyos sociales a los municipios, como no hace ningún ayuntamiento de Podemos, y el ejemplo lo tenemos con el ayuntamiento de Cádiz. Los que iban a darnos la claridad y a enseñarnos el mundo, ni han sido capaces de poner en marcha nada de lo que decían, y muchas cosas de las que han hecho son copiadas de lo que ya hacemos desde la Diputación. Con el resto de formaciones no mantenemos mala relación, pero IU ha perdido su identidad como tal en la provincia”.
*Declaraciones transcritas del programa A compás emitido el pasado lunes por Ondaluz TV, dirigido por Ana Huguet y con la participación de Roxana Saez, Mauricio García y Pedro Espinosa.