Según informó la Consejería, la mujer ingresó embarazada de 39 semanas en el hospital el pasado domingo 16 de agosto, con fiebre alta, tos y dolor torácico. El miércoles 19 de agosto se le practicó una cesárea por empeoramiento clínico y por temor de que la situación pudiera afectar al bebé, ingresando tras la intervención en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
El bebé, que se encuentra en buen estado de salud, continúa en el centro hospitalario a la espera del alta médica, según añadió la Consejería de Salud.