El seis de octubre de mil novecientos cincuenta y dos se acabó de filmar Esa pareja feliz, película que reunió a los actores más destacados y populares de la generación y que supuso la combinación perfecta de unos principios narrativos, éticos y estéticos que volvimos a encontrar en los trabajos posteriores de sus directores, Berlanga y Bardem. Así lo recoge la sección Cinemanía del enlace 20minutos.es, que nos devuelve a nuestras películas en blanco y negro con una ligera bruma, a las tardes de invierno con olor a pipas de girasol comidas a escondidas y sin hacer ruido. Entre las del oeste americano y las musicales se hicieron hueco las mejicanas y las españolas.

Los actores que dieron vida a tantos personajes llegaron a ser cosa nuestra, seres que íbamos a ver sin importar el título de la cinta. Nos encontrábamos con ellos y en aquella visita de dos horas nos hacían reír o llorar. Luego la técnica fue evolucionando, el cine también y, sin embargo, gustamos de volver a verlas, disfrutamos de esa parte del pasado con el enfoque de la experiencia y la voz propia que oímos, que nos cuenta y, sin sacar de contexto, nos motiva a analizar con ese guiño cordial y cómplice.

El color trajo el cambio de la evolución, sin embargo el público de entonces no fue capaz de ver el trasfondo, el mensaje, la crítica al cine americano, excelentemente perfecto, que lo era porque contaban con medios propios. Aquí nos debíamos de contentar con lanzar un cohete desde Fresnedillas o con frustrar un atraco en una sucursal bancaria partiendo del disparate de querer asaltarlo los propios administrativos, en una sociedad tan agridulce como la de principios de los sesenta. Pero estas películas, este blanco y negro tan nuestro, nos permite caminar por el tiempo destejiéndolo, tropezando con recuerdos que aún pellizcan guiñando, porque volvemos a vivir el ritual de nuestros abuelos para ir al cine, después de haber cobrado la paga, la espera en la puerta, las entradas entre los dedos índice y corazón de la taquillera, volviéndose hacia ella por la leve corriente de aire, el acompañamiento del acomodador hasta la butaca, el olor a pino en la sala, la apertura del telón, el blanco impecable de la pantalla, el nodo, los trailers y, por fin, la película. Pepe Isbert, José Luis López Vázquez, Conchita Montes, Josita Hernán, Gracita Morales, Fernando Fernán Gómez y tantos que andan por nuestra memoria chica de entonces y que ha ido alargándose con los años, a todos los tenemos presentes, pero mucho más este pasado viernes donde los canales de las distintas plataformas le dedicaron el día, el que se acabó de filmar Esa pareja feliz hace setenta y un años.