El subdelegado del Gobierno en Córdoba, Juan José Primo Jurado, ha destacado este jueves que los agentes de la Policía Nacional que han participado en el caso de José Bretón, el presunto asesino de sus hijos, Ruth y José, en octubre de 2011 en Córdoba, han trabajado "de la manera más profesional posible y con todo el celo profesional que se le puede exigir" y, ahora, "serán los tribunales los que decidan sobre las pruebas que presente la Policía".
En declaraciones a Europa Press, el representante del Ejecutivo central en la provincia ha subrayado que el caso ya está en la Justicia, pero aún así respeta "escrupulosamente la investigación realizada y todo lo que tiene que ver con el proceso", y, a partir de ahí, "el juez tomará la determinación que sea precisa".
En este sentido, se remite a todo lo que recogen los informes policiales en la fase de instrucción y "que sea la Justicia la que resuelva y decida", como ha apostillado Primo Jurado, quien defiende que "la Policía ha actuado, como siempre, con profesionalidad".
Al respecto, indica que es "consciente de que el equipo de profesionales que componen el Cuerpo Nacional de Policía ha realizado el trabajo de la mejor manera, utilizando la mejor técnica y el máximo empeño en que el caso se solucione", y de eso, asegura, "estamos más que seguros, como ocurre en todos los casos en los que la Policía actúa".
"LA PRESIÓN MEDIÁTICA"
Estas afirmaciones se producen después de que la defensa de Bretón en su escrito de calificación mantiene que los restos óseos hallados en la finca familiar de Bretón en Las Quemadillas, que en un principio se determinó que eran de animales, fueron cambiados por "la presión mediática".
Así se recoge en el escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, y que indica que "sus múltiples traslados con falta de garantías procesales", a juicio del letrado, José María Sánchez de Puerta, no pueden llevar a la conclusión de que esos sean los restos de los menores desaparecidos.
Además, subraya que "los restos óseos que constan custodiados en el Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba no se corresponden con los primeros restos encontrados en la hoguera y de los que dos profesionales acreditados certificaron su origen animal y no humano", en este caso la perito de la Policía Científica y un médico forense de los juzgados de Córdoba. En definitiva, sostiene que "los primitivos restos óseos han sido sustituidos por restos óseos humanos, de edades comprendidas entre los dos y los seis años".