El temporal ha seguido arreciando este fin de semana en la provincia, con una treintena de incidencias atendidas por el 112, y en la capital los bomberos han tenido trabajando especialmente con motivo de las fuertes rachas de viento. En la madrugada de ayer sofocaron un incendio en una nave industrial del polígono Llanos del Valle y, a primera hora de la mañana, tuvieron que retirar las ramas con riesgo de caída a la vía pública en la calle Antonio Romero Maroto. También por la mañana se tuvo que retirar un canalón desprendido de la fachada por las rachas de viento en la calle Rafael Ortega Sagrista. Sin embargo, el incidente más destacado se registró ayer en Linares, donde se derrumbó por completo el techo del Mercado de Abastos, informó el 112. Un agente de Policía Nacional resultó herido y posteriormente trasladado al hospital de San Agustín de Linares mientras los bomberos y servicios municipales se afanaban ayer por la tarde en la limpieza y retirada de cascotes. El derrumbe del Mercado, ubicado en la calle Velázquez, afecta a 17 puestos, y se apunta a la fuerte lluvia y a un pequeño torbellino como posibles causantes del siniestro. También en Linares, en la calle Senda de la Moza, fueron desalojados algunos vecinos de un edificio de viviendas, concretamente los de las plantas 7 y 8, a causa de la caí­ das de unas tejas del bloque de doce alturas. Nadie resultó herido pero se vieron obligadas a psar la noche en un hotel de manera preventiva. En Linares se atendieron casi una decena de incidentes por desprendimientos de árboles, cornisas y tejas a causa de las rachas de viento. El 112 desactivó anoche la alerta por viento en Jaén. Capital En lo que va de mes de marzo la capital jienense ha recibido precipitaciones por valor superior a los 134 litros. La de ayer, con más de 21 litros, fue la tercera jornada más lluviosa del mes, tras los dos primeros días del mes, cuando cayeron 61 litros acumulados. Además, según los datos de la Estación Meteorológica de la Universidad de Jaén (UJA), en lo que va de año hidrometeorológico o año agrícola (desde el 1 de septiembre) han caído en la capital 317 litros, muy por encima de la media caída en los últimos años, lo que hace augurar un buen año agrícola.