Según se pudo desprender, una vez finalizada la reunión, en lo que a seguridad respecta, no existían incidencias de gran importancia, salvo pequeños detalles que requieren de una mayor atención en la zona.
Una de las mayores quejas apuntadas desde el colectivo vecinal hacía alusión al “incumplimiento de los propios vecinos de la barriada, con los preceptos que regulan la ordenanza municipal de protección y tenencia de animales, en relación con las deposiciones de animales en los jardines del paseo Velada y aceras, y la falta de civismo por los propietarios”.