Las
voluntarias y voluntarios que trabajan con el Centro de Protección Animal de Málaga (CPAM), el antiguo Zoosanitario, quieren
volver a cuidar a sus perros y gatos, después de que no puedan acudir desde principios de agosto debido al conflicto planteado con un perro en mal estado que acabó falleciendo y cuyo caso fue expuesto en redes sociales.
Pero más allá de eso, según señaló a Viva Málaga Trinidad Irigoyen, presidenta de
Perros de Málaga que, junto con la Protectora, AMAN y Ciriana, son los encargados de sacar a los animales del antiguo Zoosanitario, hay otras demandas que se han puesto a principios del pasado mes de agosto sobre la mesa en una
reunión mantenida con la edil de Sostenibilidad Ambiental, Penélope Gómez.
Para Irigoyen, el principal problema es
asegurar el bienestar de los animales, algo que considera complicado en la actualidad por el
estado de las instalaciones, “que ya tienen diez años y que en el caso como el de los gatos, mantienen a los ejemplares en pequeñas jaulas durmiendo sobre sus propios excrementos”.
Después, quieren, por supuesto,
volver a ejercer el voluntariado por parte de sus 32 voluntarias y voluntarios como ocurría hasta el pasado mes, fundamental para
detectar los problemas y situaciones peligrosas para los perros, además de para llevarlos al veterinario cuando precisan atención; también, como destacó Irigoyen, para seguir
moviendo en redes los ‘peludos’ que se encuentran en adopción, promocionado y facilitando la misma.
No entienden que por un caso puntual, el de Coco, un animal malherido que llevaron de urgencias al veterinario olvidando comunicarlo a la oficina del centro por los nervios del momento, haya desencadenado el desencuentro que todavía se mantiene a día de hoy.
Además, la presidenta de Perros de Málaga también ha lamentado que en la citada reunión se les planteó la
necesidad para volver al ejercicio del voluntariado de elaborar y entregarles un convenio regulador que hasta ahora no les ha llegado, y del que ya han criticado que quiere imponer una absoluta
confidencialidad sin contar lo que pueda suceder en redes sociales o en la prensa.
Entre las carencias actuales, Irigoyen ha citado la
falta de personal, o el hecho de que el centro veterinario que colabora con el CPAM no recibe presupuesto suficiente sino para cubrir los primeros meses del año.
Tras el encuentro del día 29, reunión en el que proporcionaron a los representantes políticos, jurídicos y veterinarios municipales “
un dossier bastante completo con las problemáticas que llevamos viendo y arrastrando estos meses y años”, esperan ahora que se produzca
una nueva reunión que sigue pendiente, pero “a día de hoy no tenemos fecha de la nueva reunión”, señaló Irigoyen, que también indicó que
no han recibido respuesta a su petición realizada a la
Junta de Andalucía.
Mientras, sigue pendiente hablar del sacrificio cero, que pese a los anuncios hechos desde el Ayuntamiento, “no es cierto a día de hoy”.