La concejala de Playas del Ayuntamiento de Málaga, Teresa Porras, ha afirmado que la Junta de Andalucía dio el visto bueno a los chiringuitos de La Malagueta, que están en construcción y cuyo diseño ha levantado polémica, cuando ya era la Administración competente en esta materia. En concreto, la resolución tiene fecha de 10 de octubre de 2011 y las competencias se cedieron el 1 de abril de ese año.

   Así, ha manifestado a Europa Press que el proyecto constructivo que se presentó "es totalmente" acorde con el actual, y ha aclarado que el hormigón que se ve "son los aseos", de 30 metros cuadrados y que el Consistorio pidió que fueran independientes del chiringuito, a través de un pasillo, "algo que la Junta negó".

   Cuestionada por si esto es lo que afea a estos merenderos, ha señalado que entiende que sí. "Se metió la pata al no dejarnos hacer el pasillo porque los aseos iban más bajos de altura, de manera que se hubieran visto como módulos independientes", ha concretado.

   La Junta de Andalucía podría, según la edil, haber aprobado la separación de chiringuitos y aseos "pero no lo hizo". "La pantalla --de hormigón-- que se ve es motivo de eso y si tapas los 30 metros cuadrados de aseos es muy parecido, todo acristalado, a los del otro paseo marítimo", ha recalcado.

   El 21 de marzo de 2011 Costas, dependiente en esos momentos del Gobierno central del PSOE, realizó un informe de replanteo con una serie de modificaciones, incluyendo que las terrazas no sean transitables, que los aseos se unan a los chiringuitos, y que el sótano tenga 100 metros cuadrados. Esto último se amplió, ya por parte de la Junta de Andalucía, a 150 metros cuadrados.

   "Nosotros nos basamos en el proyecto aprobado, la terraza no es transitable pero las torretas no quiere decir que se utilicen para suministro", ha informado, indicando que están a la espera de que la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta conteste al escrito remitido por el Consistorio con fecha de 20 de marzo de 2013.

   Sobre la posibilidad de que el Ejecutivo autonómico autorice el derribo de estos chiringuitos, la concejala se ha preguntado cómo se va a tirar algo que "tiene licencia y el visto bueno del que tiene que darlo", en este caso, de la Junta de Andalucía. Además, ha incidido en que si no se hubiera aprobado, "el Ayuntamiento no habría dado la licencia de obra".

   Un informe de Costas de marzo de 2011 ya emitió unas consideraciones generales, entre las que se incluían aspectos como que no se podía utilizar la terraza, que la altura total prevista, según los planos, superaba los siete metros, duplicando de este modo la inicialmente prevista; o que el sótano debía tener un máximo de 100 metros cuadrados.

   Sin embargo, las competencias cambiaron de manos y fueron a la Junta de Andalucía apenas un mes después de dicho informe, siendo esta Administración la que, ha puntualizado la edil del PP, dio el visto bueno.