Comienza la edición con un cuarteto infantil. Procedente de la capital, con el nombre de Parchís 2.0. Ya quisieran algunos cuartetos adultos... Espectacular la puesta en escena de estos cinco chicos que caracterizan a las fichas del parchís. Muy buena parodia que interpretan para presentarse. La Amarilla es la gafe; Azul, el deportista; Verde, la ecologista y Roja, la pasión; ¿y el blanco? El dado. Frescura para estos pequeños en cada verso, con muy buena rima y muchísima gracia.  Quiero aprovechar la ocasión para felicitar a la autoría,  por su música y letra, al igual que la dirección de Eduardo Jesús González Ortega. Engarzan una serie de cuplés bastantes simpáticos,  ambos al padre. Como dicen: “Mi padre es un ejemplo, pero mi madre es una monstrua”. Ponen broche con un popurrí bien cantado y a la altura del resto del repertorio. Entre coreografías, bailes y palmas son despedidos con una gran ovación.

La siguiente en aparecer es Bajo tu manga. Nos llega desde Peñarroya-Pueblonuevo (Córdoba). Comparsa bien afinada que nos traslada a un casino. Con baraja de cartas en mano encarnan a un croupier. Buena presentación. Pasodobles a “la falta de personal en nuestros hospitale”s, y al Alzheimer. Cuplés simpáticos a Cataluña y a la suegra, ambos aplaudidos, que finalizan con un estribillo por tanguillo,  con un bello piropo a la mujer, pidiéndole a esta que le deje ser su Rey de corazones: “Déjame, que entre cartas viva yo soñando,/Déjame, conquistarte de amor jugando mano a mano,/Déjame, que te mire a los ojos y te diga que te amo,/Déjame, que te cuide, te ame, te mime, te haga sentir la mujer más feliz/Dama de los amores./Seré tu rey de corazones. Concluyen con un popurrí con cuartetas interesantes. Sin grandes estridencias ni alardes de potencia, ultiman entre palmas su buena actuación.

De Torremolinos son los componentes de la siguiente agrupación, la murga El vecino del cuarto. Con letra, música y dirección de Antonio Manuel Pareja. Con un tipo de monstruos y prácticamente a oscuras realizan su presentación. Con mucho aliento desde el patio de butacas acometen sus dos pasodobles. Muy aplaudidos, destacando el primero de ellos a “esos artistas, componentes de agrupaciones que evitan participar en el carnaval de calle para así cuidarse sus gargantas para los diferentes concursos”. Muy buena tanda de cuplés donde nos cuentan algunas de sus anécdotas con los más pequeños. De categoría. Popurrí ingenioso, de menos a más, despunta una de sus cuartetas que interactúan con el público haciéndoles participe para contestar unas adivinanzas: una genialidad. Muy buena actuación que es agradecida con una fuerte ovación y el patio de butacas puesto en pie.

Después de un ligero tentempié, se abre el telón para El sueño de mi vida. Con un poco de imaginación esta murga local confecciona un disfraz para presentarse ante su público para caracterizar a “un tipo” que trabaja todo el santo día. En la presentación describen su personaje algo desaliñado. Pasodobles muy críticos, y es que en ambos reparten leña a ayuntamiento, alcaldía, PP, etc. Cuplés simpáticos con un estribillo que hasta el momento es lo mejor del repertorio. Ponen fin a su actuación con cánticos de: “ Ya nos vemos en la calle “. Y así será. Es despedida entre aplausos.



La penúltima de la noche y desde Aguilar de la Frontera (Córdoba), le toca el turno a la comparsa Una comparsa de diario. Grupo que se estrena ante nuestro público con el propósito de mejorar la sesión del día de hoy. Disfraz muy lucido donde predominan escritos y recortes de periódicos que adornan con un sombrero que simula a un barco de papel. Con una niña en su puesta en escena, nos desvelan el personaje. Buenos pasodobles, afinados y bien interpretados. Letras al fallecimiento de un abuelo y así se lo explica a su hija en el primero, y otro muy  original, cantado a dos voces explicando lo hermoso que es un pasodoble bien cantado a tenor y segunda, sin grandes estridencias que a veces incluso desafinan, respetando la melodía inicial. Buena tanda de cuplés con un estribillo muy aplaudido: “Si sientes que quieres huir y fugarte del mundo,/vente conmigo mi niña,/te cantaré carnaval a diario/hasta que el calendario/nos traiga el febrero revolucionario,/y entre sus mares de miel/que nos lleve hasta el edén/mi barquito de papel,/mi barquito de papel”. Finiquitan con un popurrí con un sinfín de dimes y diretes. Muy bien interpretado que hacen levantar al Alameda.

Cierra el telón de la jornada la murga malagueña cabeza de serie Con el culo al aire. Con letra de Raul Berrocal y música de Antonio Carlos Rojas, que a buen seguro intentaran la clasificación del año anterior, donde se hicieron con el quinto premio. Que bien canta este grupo. No olvidemos que esto, ante todo, es un concurso de coplas. Muy buena presentación en la que nos narran el personaje, y es que estos profesionales de la levitación y las distintas artes para conseguir una perfecta concentración. Primer pasodoble, de ellos y para ellos, nos cuenta el porqué, a pesar de unas dudas iniciales, hoy están aquí sobre las tablas. El segundo, para los más pequeños de la casa: “Al reloj se le han parado las horas/Ya toy loquito por verlo/Y se me acaba de ir/Ya por fin termino su primer día/Me devuelve su alegría/Loquito que den las tres/Te vengo yo a recoger/De nuevo a tu guardería”. Precioso. Serie de cuplés muy graciosos, al rey mago “chiquetete” en uno de ellos. Venían a meditar, a relajarse, y  probablemente lo consiguieran después de la gran actuación. Popurrí brutal, muy buenas coplas, simpáticas, muy bien cantadas, que conectan con el público llevándose la ovación de la noche y al grito de “esto si que es un peazo murga”.