Desde 1992 el servicio de
abastecimiento de aguas de Fuengirola está en manos de la empresa concesionaria
Gestagua y, según Ciudadanos, sería más barato para los ciudadanos si el Ayuntamiento sacara a concurso el servicio.
La formación naranja lleva tiempo denunciando públicamente que
el servicio es “totalmente ilegal” ya que se firmó por 10 años en los noventa. “Ha sido prorrogado pero llevamos 4 años totalmente fuera de cualquier tipo de legalidad, en precario”.
Javier Toro, portavoz del Grupo Municipal Cs, recuerda que el pliego se aprobó “cuando Fuengirola tenía casi la mitad de la población actual”. Esto conlleva, según critica, que “
estamos pagando un agua más cara que Mijas. Tenemos
peores servicios que Mijas, por ejemplo”. Por ello, advierte que “si se hiciera un nuevo concurso podríamos optar, en caso de que se optara por la externalización, por un canon mucho más alto, unos mejores servicios, y lo que es más importante, un agua más barata para los fuengiroleños”.
Toro esgrime que la situación de
“ilegalidad” del
contrato de Gestagua “tiene un perjuicio grave económico para todos los fuengiroleños. Supone alrededor de 600.000 euros cada año".
Por ello, desde Ciudadanos no descartan recurrir a la administración o los juzgados. “El equipo de Gobierno del PP sigue permitiendo que la empresa concesionaria, de manera totalmente ilegal, en contra de los criterios de Intervención, del Consejo Consultivo de Andalucía y de la Audiencia Nacional, le está permitiendo pagar el beneficio industrial, cerca del 10% de los gastos de consumo que, si sumamos los cuatro últimos años, serían cerca de 2.400.000 euros que no deberían haber sido abonados. No se trata de un criterio político, sino de un criterio técnico-jurírico que indica que cuando un contrato está en precario, ilegal, no se debería haber pagado”.
Por todo ello, asegura, “estamos ante un quebrantamiento de la ley en un contrato de servicios públicos. Estamos privando a otras empresas que pueden optar a este servicio, por lo cual
estamos pagando un agua mucho más cara, y un
peor servicio porque se está cumpliendo un pliego de 1992. Una Fuengirola que no tiene nada que ver con la Fuengirola que tenemos actualmente”.
A esto habría que sumar que “estamos ante un contrato que se debería haber iniciado en octubre 2017, que se hace en contra de los criterios de intervención, y en contra de la concurrencia y de poder dar un mejor servicio a los fuenriroleños, no entendemos qué interés tiene el Gobierno del Partido Popular para seguir manteniendo esta situación ilegal y en contra de los intereses de los ciudadanos”.
Por último, Toro indica que “la gestión de Gestagua o el control que está haciendo el equipo de Gobierno sobre la empresa suministradora se parece a una cebolla: Cuantas más capas levantas, más ganas dan de llorar. Nosotros vamos a levantar la alfombra, vamos a sacar todas las irregularidades que ya estamos investigando y que hay en cuanto a falta de control: Lo llevaremos a la administración o a los juzgados en el caso de que fuera necesario”.