Al menos seis personas se han fallecido a consecuencia del sistema tormentoso que atraviesa Estados Unidos, formado por un sistema de tornados en el sur, que evoluciona a tormenta de nieve conforme se desplaza hacia el norte del país.
La mayoría de los fallecidos perdió la vida en la carretera, a causa del mal tiempo, que además ha dejado sin electricidad a más de 280.000 personas. Desde el sur al medio oeste del país se han registrado hasta el momento 34 tornados y las tormentas en el norte han dejado hasta 20 centímetros de nieve en algunas localidades.
Dieciocho estados del país, desde Tennessee hasta Maine, se encuentran bajo alerta por tormenta y vendavales, y más de 1.000 vuelos han sido cancelados, según informa la cadena ABC.
El Servicio Nacional Meteorológico de Estados Unidos ha advertido de que los tornados en este periodo invernal son particularmente peligrosos por la velocidad a la que se desplazan y muchas veces son difíciles de apreciar al estar ocultos por la oscuridad y la lluvia.
