El Tribunal de la región de Pskov (noroeste de Rusia) condenó hoy a quince años de prisión al policía estonio Eston Kohver, tras declararlo culpable de espionaje y otros delitos, informó hoy su abogado, Yevgueni Axiónov.
En declaraciones a medios locales, el letrado añadió que a su defendido, que tendrá que cumplir la pena en el territorio de Rusia, se le impuso también una multa de 100.000 rublos, poco más de 1.500 dólares.
Según la acusación, Kohver fue detenido el 5 de septiembre de 2014 por el Servicio de Seguridad de Rusia en el lado ruso de la frontera ruso-estonia en posesión de armas y una elevada suma de dinero
Al día siguiente de su detención, el agente, que hacía un servicio especial de seguridad, quedó en prisión preventiva acusado formalmente de espionaje, cargo a los que más tarde se sumarían los de contrabando y porte ilegal de armas, así como el de entrada ilegal en el país.
Las autoridades de Estonia denunciaron que Kohver, que llevaba a cabo un investigación en la zona fronteriza, fue secuestrado a punta de pistola en territorio estonio y luego llevado al lado ruso.
"Todo el proceso judicial ha sido una farsa", declaró hoy el primer ministro de Estonia, Taavi Rõivas, tras conocer la sentencia dictada en Pskov, según informó desde Tallin la agencia rusa Interfax.
Recalcó que Estonia y sus instituciones respaldan a Kohver y "harán todo por que Rusia lo ponga en libertad".