Los Ministerios del Interior de Alemania y Grecia llegaron anoche, "a falta de un último intercambio de misivas", a un acuerdo para la devolución de inmigrantes que sean interceptados en la frontera germana y que previamente hayan pedido asilo en el país heleno, informó hoy el Gobierno alemán.
"Hemos llegado a un acuerdo con Grecia y su cierre es inminente. Falta un último intercambio de misivas, pero hemos llegado a un acuerdo", anunció hoy en rueda de prensa la portavoz del Ministerio del Interior alemán, Eleonore Petermann.
Agregó que, tan pronto como se haya llevado a cabo su ratificación, se informará tanto del acuerdo como de su contenido.
Aún así, avanzó que al igual que en el acuerdo suscrito con España el pasado 6 de agosto, las devoluciones "se limitan a los casos en la frontera germano-austríaca", donde desde julio se llevan a cabo controles fronterizos, y a aquellas personas que hayan solicitado asilo en otro país comunitario, en este caso Grecia.
Si se detecta una coincidencia con el Eurodac, la base de datos europea de huellas dactilares para identificar a solicitantes de asilo e inmigrantes irregulares, aquellos registrados como peticionarios en Grecia podrán ser devueltos a ese país "siempre en el plazo de 48 horas", agregó.
En cuanto a Italia, señaló que las negociaciones continúan y que están "muy avanzadas".
"También se están llevando a cabo conversaciones al respecto a nivel ministerial y partimos de la base de que también habrá un acuerdo con Italia", aseguró.
El acuerdo con España, el primero de estas características que quiere cerrar Alemania con otros socios europeos, entró en vigor el pasado 11 de agosto, día en que la canciller, Angela Merkel, comenzó su visita de dos días al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, en el Parque Nacional de Doñana, con el reto migratorio como uno de los temas centrales.
La portavoz del Interior expresó en su momento su convencimiento de que el acuerdo con España se logró cerrar con rapidez gracias al nivel de cooperación de Madrid y su voluntad en frenar la migración secundaria.
