No ha habido declaraciones de los responsables del comité de empresa de la concesionaria de la Limpieza en San Fernando. Pero sí la concentración anunciada reclamando un convenio justo que es lo que vienen persiguiendo desde el año pasado.

Las declaraciones han partido del responsable de Organización de FSP-UGT, que junto con los representantes a nivel provincial del sindicato CCOO han tenido el primer contacto con la empresa Cespa para conocer sus intenciones.

La empresa elegida por la mesa de negociación ha manifestado que está dispuesta a hablar después del primer mes de haber tomado posesión del servicios y una vez que ajuste los números. La dificultad que señalaba el representante de UGT a nivel provincial, Juan Manuel Rocha, es que la situación está peligrosamente invertida, porque no es lo mismo confeccionar una plica adaptándola a un convenio colectivo que un convenio colectivo a una plica en la que los números están mucho más que justos si la empresa quiere cumplir con su compromiso.

La única solución que ven es la misma que venían reclamando los trabajadores, sentarse con la empresa Urbaser y negociar ese convenio aprovechando que la petición de documentación previa a la concesión no se trató en el Pleno del jueves.La situación está, pues, en compás de espera a expensas de lo que decidan las dos empresas, la que está y la que tiene que venir.

Para que los trabajadores puedan reunirse con Urbaser, habiendo una plica aprobada y un trámite tan adelantado como el actual, tendría que mediar el Ayuntamiento para que los acuerdos con Urbaser no supusieran una alteración inasumible de las condiciones en las que se ha licitado. Para que se produzca una negociación conn Cespa -reiterar que la reunión de ésta ha sido con las centrales sindicales representadas en el comité, no con el comité- los trabajadores tendrían que confiar en que la nueva empresa asegurara su voluntad de llegar a u acuerdo y después del primer mes de servicio, que lo pudiera cumplir con unas cuentas tan ajustadas.

Mientras tanto, los trabajadores mantienen la huelga prevista en Semana Santa y seguirán estudiando movilizaciones para no perder los derechos adquiridos.