La situación de los mariscadores a pie de la localidad se trató de manera amplia y detallada ayer en el Palacio Municipal. El alcalde, Víctor Mora, había convocado a los profesionales a un encuentro con responsables de la Junta de Andalucía y del Parque Nacional de Doñana, litoral en el que trabajan principalmente, para abordar los problemas del sector. En ciudad tieneN licencia para ejercer el marisqueo a pie casi una treintena de personas.
En el encuentro participaron, además del propio alcalde, el delegado territorial de Agricultura y Pesca, Federico Fernández, junto a técnicos de la Delegación, el gerente del Parque Nacional de Doñana y el responsable municipal de Agricultura y Pesca, Rafael Louzao.
Los mariscadores trasladaron a los responsables de las administraciones y del Parque la situación del sector en relación a los horarios y periodos de vedas y las ayudas por los paros por toxinas, entre otras cuestiones.
Una de las principales es la preocupación por el furtivismo, un problema que el Ayuntamiento viene denunciando y trasladando a las autoridades competentes para que pongan los medios necesarios para luchar contra una práctica que atenta contra el trabajo de los mariscadores a pie y que también pone en peligro la salud pública, ya que esas capturas no cuentan con ningún tipo de control sanitario. En la reunión se adquirió el compromiso de que las tres administraciones -Ayuntamiento, Junta y Gobierno- traten de manera conjunta esta problemática para atajarla.
También se acordó trasladar algunas de las cuestiones al Consejo de Participación de Doñana, mientras que la Delegación Territorial de Agricultura y Pesca en Cádiz estudiará otras propuestas relacionadas con el trabajo de los mariscadores.
