A pesar de tener más de 20 años de historia, hasta 2006 en España pocos sabían lo que era un jardín vertical, y mucho menos qué podía aportar a las ciudades y a las personas. Desde hace varias décadas, esta invención del botánico francés Patrick Blanc ha venido siendo objeto de estudio en las principales universidades del mundo entero, con el objeto de conocer desde un punto de vista científico cómo esta nueva forma de disponer la naturaleza sobre un plano vertical beneficia tanto a las personas como a las ciudades. Actualmente, cada vez existen más estudios y datos que demuestran que estos nuevos sistemas de enverdecer nuestro entorno aportan innumerables beneficios y posibilitan nuevas formas de entender el paisajismo y la agricultura. Estos son los cinco beneficios más importantes que aportan los jardines verticales, o muros vegetales, como los denomina Patrick Blanc, para hacer nuestra vida mejor y más saludable.
1. Reducen la temperatura del ambiente. La humedad existente en el sustrato que aloja las plantas y la que evaporan las mismas plantas mediante la evapotranspiración consigue que en las zonas contiguas a un jardín vertical la temperatura pueda llegar a descender hasta en 5ºC, debido al enfriamiento evaporativo. Esto supone un importante beneficiobioclimático en los edificios y un ahorro en las instalaciones de climatización.
2. Mejoran la calidad del aire. Las plantas, como bien es sabido por todos, generan oxígeno y capturan el CO2, consiguiendo mejorar la calidad del aire que las rodea. Además, las bacterias existentes en las raíces de las plantas de un jardín vertical realizan una labor de fijación y asimilación de componentes orgánicos volátiles que son tóxicos para las personas, mediante una labor de biofiltración.
3. Incrementan nuestro bienestar y relajación. La contemplación de un jardín, de la naturaleza, siempre es una experiencia agradable que nos relaja y nos hace sentir bien, reduciendo nuestro nivel de estrés. Estorepercute positivamente en nuestro estado de ánimo, incrementado nuestra sensación de bienestar y aportando beneficios para nuestro organismo, permitiendo, incluso, disminuir el umbral del dolor en las personas enfermas.
4. Reducen los niveles de ruido. Las pantallas vegetales funcionan a modo de barreras acústicas que difractan y absorben el sonido, reduciendo los niveles de ruido y mejorando la calidad acústica del ambiente.
5. Incrementan la superficie de zonas verdes en las ciudades. La OMS fija un ratio de superficie de zona verde por habitante de 10-15 m2/habitante como indicador de sostenibilidad y calidad de vida. Esta relación no se llega a cumplir en la mayoría de ciudades. Los jardines verticales pueden colonizar superficies que hasta ahora no podían explotar su potencial paisajístico, haciendo subir esta media y creando ciudades más verdes y saludables.
Por todo esto, cada vez existen más empresas dedicadas a su diseño e instalación. En Sevilla, fruto de las investigaciones llevadas a cabo por un equipo de profesores de laUniversidad Hispalense desde 2006, surge en 2010 la empresa de Base Tecnológica Terapia Urbana, especializada en el diseño, instalación e investigación de este tipo de sistemas, y que trabaja integrando este tipo de paisajes verticales en los edificios nuevos y existentes. Recientemente, han concluido un jardín vertical exterior, situado en la ampliación de la clínica USP Sagrado Corazón de Sevilla, que cuenta con 40 m2 donde se organizan más de 1.400 plantas seleccionadas de entre más de 40 especies, y que funciona a modo de acogedor y ornamental mural de acogida para todos los visitantes que acceden al nuevo edificio fruto de la ampliación. Este jardín vertical constituye el primer jardín vertical instalado en un edificio hospitalario de toda Europa, y está aquí, en Sevilla. La mejor manera de comprobar muchos de los beneficios arriba indicados es acercándose al mismo hospital y poder sentirlos en persona.
