Después de que la Diputación de Sevilla paralizase en 2015 la demolición del antiguo hospital psiquiátrico de Miraflores, pues la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento había supeditado la preceptiva licencia de derribo a un "catálogo y un plan especial de la parcela", el pleno ordinario celebrado este viernes por el Consistorio ha aprobado definitivamente dicho catálogo.
En concreto, el pleno del Ayuntamiento de Sevilla ha aprobado este viernes, de modo definitivo, el 'Catálogo de inmuebles de las instalaciones provinciales de centros sociales de Miraflores. Antiguo Hospital Psiquiátrico', toda vez que según la documentación recogida por Europa Press, fue el pasado 13 de mayo cuando la junta de gobierno del Consistorio acordó la aprobación inicial de dicho documento.
Fue en 2014, como muestran las hemerotecas, cuando la Diputación licitó un contrato destinado a la demolición del antiguo hospital psiquiátrico de Miraflores, encuadrado en un antiguo complejo ubicado junto al barrio de Pino Montano, entre el trazado norte de la autovía de circunvalación SE-30 y la carretera SE-020 o Ronda Supernorte. El recinto, propiedad de la Diputación, dejó de acoger enfermos mentales allá por 1999 y después de caer en un profundo desuso, la institución decidió derribar el antiguo hospital psiquiátrico, dado que su deterioro arquitectónico constituye un peligro.
El proyecto de demolición contaba con un presupuesto máximo de 572.921 euros y después de su licitación, fue adjudicado a la empresa de derribos Erri-Berri, según explicaba a Europa Press el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, en el marco de una entrevista. "No podemos permitir ningún tipo de riesgo, por eso promovimos el derribo", manifestaba.
"NO HAY LICENCIA"
Pero aunque el contrato del derribo del antiguo hospital fue firmado el 15 de diciembre de 2014, en agosto de 2015 Rodríguez Villalobos explicaba que las tareas de demolición no habían comenzado, porque la Gerencia de Urbanismo no había concedido licencia para ello. Y es que en febrero de 2015, después de solicitar la licencia de derribo, la Gerencia de Urbanismo pidió a la Diputación "un catálogo y un plan especial de toda la parcela" en la que se encuadra el antiguo hospital psiquiátrico, "en atención a lo que dispone el Plan General de Ordenación Urbana".
Dada esta situación, según Rodríguez Villalobos, la institución provincial decidió "desistir" de la licencia de demolición solicitada, para acometer la redacción de los aspectos solicitados por la Gerencia de Urbanismo, siendo ahora aprobado definitivamente el catálogo de inmuebles de la parcela.
Según Fernando Rodríguez Villalobos, el derribo es "la única solución" para el antiguo hospital psiquiátrico de Miraflores, a cuenta de su deterioro arquitectónico, toda vez que de cara un futuro, cuando el contexto económico haya evolucionado, "lo ideal para ese suelo es convertirlo en una ciudad de la dependencias, con equipamientos como un centro de autistas, uno para discapacitados o para personas con Alzheimer".