La autoridad judicial ha dictaminado el "inmediato" ingreso en prisión para cinco de las siete detenidos, integrantes de un clan familiar, tras participar en varios tiroteos, junto a miembros de otro clan, en la barriada sevillana de Torreblanca "para conseguir el control del barrio", mientras que las otras dos personas han quedado en libertad con cargos, según informa la Policía Nacional en un comunicado.
A los detenidos se les había acusado de delitos de tentativa de asesinato, tenencia ilícita de armas, amenazas graves por arma de fuego, delito contra la salud pública y defraudación del fluido eléctrico.
En una de las ocasiones, supuestamente, intentaron abatir a una de las víctimas "que se había acabado de subir en su vehículo junto con su mujer y su niño de diez meses, quienes se agacharon al escuchar las primeras detonaciones y pudieron salvar sus vidas". La investigación comenzó tras diversos tiroteos ocurridos en las últimas semanas en la barriada de Torreblanca, "hechos de extrema gravedad ya que, algunos de ellos, se llevaron a cabo en horas diurnas y con afluencia de personas en las calles".
Tras diversas gestiones, los agentes constataron la existencia de "grandes clanes familiares" involucrados en los tiroteos y que, presuntamente, estaban enfrentados por conseguir el control del barrio. Para ello, intentaban controlar la venta de estupefacientes o apoderarse del mayor número de viviendas, inmuebles que posteriormente subarriendan y utilizan a su conveniencia para ocultar armas de fuego, sustancias estupefacientes o utilizarlas como punto de venta de droga, añade el comunicado.
Los policías constataron que los disparos fueron realizados por los miembros de un mismo clan familiar. En concreto, el motivo de los disparos fue la venta de una vivienda en el barrio, "inmueble que pretendía controlar el clan de los investigados". Las víctimas desoyeron las amenazas, y los detenidos tomaron la decisión "no solo de que esta familia no se hiciera con el piso, sino que tenían que abandonar el barrio".
Las rápidas diligencias de los investigadores consiguieron identificar a los siete participantes en los incidentes y en menos de 24 horas se situaron los domicilios donde se encontraban todos los presuntos autores, que llevó a los agentes a las barriadas de Torreblanca, Las Tres Mil Viviendas y hasta la localidad de Carmona (Sevilla), donde tenían una parcela que utilizaban como "refugio seguro".
Finalmente, el pasado jueves se llevó a cabo el operativo policial que culminó con la práctica de seis registros simultáneos y en el que participaron más de 70 agentes de diversas especialidades de la Policía Nacional. En los registros se intervino una escopeta de calibre 12, una pistola de calibre 9 mm --ambas en perfecto estado de funcionamiento-., machetes, katanas y dinero en efectivo. Además se localizó una plantación de marihuana en el interior de una de las viviendas de Torreblanca, que estaba conectada de manera fraudulenta a la red eléctrica. Los arrestados, "con un amplio historial delictivo", han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial.