La Guardia Civil ha investigado a cuatro hombres como presuntos autores de delitos de incendios forestales cometidos en las provincias de Palencia y Castellón, según ha informado la institución.
En concreto, en la provincia palentina se cometieron dos incendios por imprudencia grave al incumplirse las medidas preventivas en épocas de alto riesgo de incendio forestal fijadas en la Comunidad de Castilla y León. Los hechos tuvieron lugar el pasado 18 de julio, cuando las llamas de un incendio forestal en la localidad de Palenzuela quemó unas 15 hectáreas aproximadamente de tierra de cultivo cosechada, viñedos y masa arbórea.
Las primeras investigaciones de la Guardia Civil dedujeron que fue provocado por una segadora de alfalfa, siendo investigado por estos hechos un hombre de 24 años, vecino de la provincia.
Un día después, el 19 de julio, se inició otro incendio forestal en la localidad de Villalafuente, término municipal de Saldaña, que afectó aproximadamente a 19 hectáreas de cereal y a una hectárea de masa forestal. En esta ocasión, las investigaciones de los agentes desprendieron que fue provocado por una máquina cosechadora. Por estos hechos fue investigado un hombre de 56 años, también vecino de la provincia de Palencia.
En ambos casos se comprobó que los incendios fueron producidos supuestamente por imprudencias graves, al incumplir los autores las medidas preventivas fijadas en la Comunidad de Castilla y León en época de peligro alto de incendios forestales y realizar labores agrícolas con maquinaria a menos de 400 metros de un monte.
INCENDIOS EN CASTELLÓN
En el caso de Castellón, las investigaciones señalan que se depositaron cenizas y brasas cerca del Parque Natural de Sierra de Espadán que obligaron al desalojo de una veintena de personas.
Los hechos se remontan al pasado 23 de julio, cuando se dio el aviso por un incendio forestal en la localidad de Fuentes de Ayódar, corazón del Parque Natural de la Sierra Espadán, un espacio protegido considerado como Zona de Especial Protección de Aves y lugar de Importancia Comunitaria.
Los guardias civiles especialistas encargados de la investigación determinaron que el incendio se produjo en las inmediaciones de una caseta de aperos por acumulación de cenizas y brasas calientes sobre la cubierta vegetal con combustible ligero muerto (con hierba seca). Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza comprobaron que no era la primera vez que se producía un incidente similar en el mismo lugar.
El incendio producido en la zona de Fuentes de Ayódar obligó a la Guardia Civil a desalojar por seguridad a una veintena de personas. Tras la investigación han sido investigados dos hombres como supuestos autores de un delito contra la seguridad colectiva por incendio forestal.