La ciencia ha recibido en 2015 la Agencia Estatal de Investigación, un organismo que el sector llevaba esperando desde 2011 y que, finalmente fue aprobada el pasado mes de noviembre. Aún así, la necesidad de aprobar algunos de sus consejos y cargos directivos no permitirán que esté completamente activa hasta 2017.
La puesta en marcha de la agencia estaba mandatada por la Ley de la Ciencia, aprobada en primavera de 2011. El texto daba al Ejecutivo un año para su creación, que debía de ser con coste cero. Además, el organismo, que contará con unos 300 empleados, estará dirigida por un científico de reconocido prestigio en el campo de la gestión de la I+D.
La agencia se encargará de la financiación del sistema de I+D español y de la evaluación y de la asignación de fondos. Realizará, además, actividades de seguimiento de las actuaciones financiadas para mejorar la medición de los resultados y de su impacto.
A su vez, tiene como propósito mejorar la eficacia de los servicios prestados por la Administración General del Estado en I+D+i, la incorporación de las mejores prácticas internacionales de evaluación, la rendición de cuentas de las ayudas otorgadas, y la simplificación de los procedimientos administrativos.
EL CONSEJO RECTOR EN ENERO
El organigrama de este organismo estará encabezado por el secretario de Estado de I+D+i, mientras que la dirección correrá a cargo de un científico o tecnólogo de reconocido prestigio en el campo de la gestión de I+D, que será el único responsable ejecutivo.
El Gobierno se puso en noviembre un plazo no superior a 60 días para que se constituya el órgano de gobierno de la agencia, llamado el Consejo Rector. Será quien deba nombrar a dicho director. En este periodo, de manera provisional, la dirección de la Agencia será asumida por la directora general de Investigación Científica y Técnica.
En el Consejo Rector se encontrarán los ministerios, los agentes del sistema de ciencia, investigadores, tecnólogos y representantes de los sindicatos. A su vez, habrá un comité científico-técnico, formado por científicos de reconocido prestigio, que asesorará en la planificación de la agencia.
UN SISTEMA DE EVALUACIÓN
Por otra parte, la agencia permitirá la planificación plurianual de sus recursos, pudiendo fijar objetivos a medio plazo y posibilitando que las convocatorias de proyectos o de recursos humanos cuenten con la necesaria previsibilidad en los plazos y en la financiación. Dispondrá además de un sistema de evaluación independiente basado en criterios científicos y técnicos para asegurar la promoción de la calidad y la excelencia.
El Ministerio de Economía ha explicado que, con la creación de la agencia, se establece un modelo equiparable con los países punteros en ciencia de la UE y se siguen las recomendaciones del Consejo de la UE y del ERAC Peer Review, que hizo una auditoría en 2014 del sistema español de Ciencia, Tecnología e Innovación a petición del propio departamento.