No obstante, según los activistas, en las últimas fechas “han sido varios los problemas que han ocurrido en esta zona del litoral, muy cercana al polo químico del Campo de Gibraltar”, aunque aseguraron que no quieren precipitarse en su diagnóstico sobre lo ocurrido ayer, pero sí confirman que “en estos días el olor ha sido intenso”, y pueden deberse a “escapes”.
Por último, apuntaron los ecologistas a la necesidad de “adoptar medidas que sean contundentes” y piden que los responsables políticos y las autoridades locales que tomen cartas en el asunto, porque “no es normal que la gente se esté bañando en la playa de Puente Mayorga con una mancha amarilla a su alrededor”, indicó Ñeco.
Por otro lado, la defensora del medio ambiente aseguró que “una vez que los vecinos me comunicaron el problema, acudí rápidamente a la zona donde, efectivamente, había un fortísimo olor y una enorme mancha de aceite en bastantes metros de la superficie de la orilla de la playa”.
Además, la ecologista aseguró y denunció que “la playa se encontraba abierta tan normal, a pesar de que había un agente de la Guardia Civil en la misma zona, a quien informé del vertido”.
“Se trata del tercer vertido en los últimos días, ya que la semana pasada los vecinos se quejaron durante dos días de fuertes picores y mareos, y otros dos días tuvieron que cerrar las ventanas de sus casas por el fuerte olor que había a gas, por lo que muchos de los afectados llamaron a la policía para informarse de lo que estaba pasando pero no obtuvieron información alguna porque nadie sabía nada, y la playa siguió abierta al baño sin que nadie tomase ningún tipo de precaución aunque estaban informados de todo”, afirmó Ñeco.
Sin embargo, a pesar de haber un nuevo vertido, la ecologista informó que “la situación sigue igual porque, a pesar de haber llamado al 112 y denunciar la situación, la playa siguió abierta muchas horas hasta que los socorristas prohibieron finalmente el baño”, y señaló que “los vecinos me informaron que los socorristas les han comentado que se trata de un disolvente altamente tóxico,por lo que se supone se ha hablado con la empresa responsable, pero aún no tenemos constancia de nada”
El colectivo reclama responsabilidades a las administraciones
La ecologista Raquel Ñeco calificó ayer de “indignante” que la delegada provincial de Medio Ambiente, Silvia López, diga con “tanta tranquilidad que la calidad de las aguas son del 100% buenas en la Bahía de Algeciras; y que la calidad del aire en el Campo de Gibraltar fue admisible en el 88% de los días del año pasado”, además, criticó las declaraciones de la responsable en Cádiz “que dijo que las industrias superan un 23,5% el dióxido de carbono impuesto por Kioto en la comarca y que nuestra administración diga que todo está muy bien y que aquí se vive estupendamente, algo que es mentira y que los que vivimos aquí lo sabemos”.
Por ello, Ñeco exige a las autoridades políticas que digan la “verdad” y busquen la solución al problema “porque mejor que nadie sabemos nosotros que todo no es tan bonito, sino todo lo contrario, y que no intenten limpiar la imagen de la comarca y den de una vez una calidad de vida a los ciudadanos y una vida digna”.
Por último, la ecologista lamentó que por vivir en la zona “tengamos entre un 40% y un 50% más de posibilidades de contraer determinados tipos de cáncer si vives aquí que en otros lugares de España”, y exigió a la Junta de Andalucía venir a ver el problema y limpiar el aire y el agua de la comarca “y no su imagen”.
