El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, anunció ayer que se revisará “caso por caso” cada una de las situaciones de las familias que estén en riesgo de desahucio en el parque municipal de la vivienda pública de Sevilla (Emvisesa), de manera que “ninguna familia perderá su vivienda como consecuencia de la situación de crisis económica”.
Según especificó Zoido, esta comisión interdisciplinar revisará desde este lunes “todos los trámites de los posibles desahucios” que haya dictado Emvisesa para que “no se pueda llevar a cabo ningún desalojo porque la familia afectada no tenga recursos económicos por culpa de la crisis”. De esta manera, explicó que, de un montante aproximado de unas 2.100 viviendas con las que cuenta Emvisesa, son unas 600 familias las que pudieran ser desahuciadas por incumplimientos en el pago, es decir, “una de cada tres familias”.
Además, la mencionada comisión interdisciplinar analizará en primer lugar el estado de las familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad. La manera de proceder, según ha explicado el alcalde, partirá de un análisis de Emvisesa que, cuando detecte que una familia tiene problemas de vulnerabilidad, derivará el asunto a la Delegación de Asuntos Sociales, que a su vez analizará y tomará las medidas pertinentes para que la familia no pierda la vivienda.
Por su parte, el Grupo Municipal Socialista que encabeza Juan Espadas ve “injustificable el mes perdido por el alcalde para tomarse con la seriedad que se merece la crudeza de la realidad que viven los ciudadanos en torno a los desahucios”, y lamenta “que Zoido sólo actúe a golpe de titular o cuando la presión social y mediática le empuja”. Además, Espadas exige a Zoido que “deje a un lado el oportunismo y la expectación que busca con reuniones de urgencia cuando en el pleno de octubre, el alcalde y todo el Grupo Popular votaron en contra de la moción socialista que proponía soluciones de calado para evitar dramas personales”.
Así, lamenta el mes perdido por parte del Consistorio “que se autoemnienda anunciando ahora decisiones que caen por su propio peso, después de que los dos grandes partidos hayan decidido alcanzar un acuerdo a nivel nacional”. Pide explicaciones de “por qué lo que ahora se anuncia a bombo y platillo, no era tan bueno cuando lo planteó el PSOE en octubre”.
