Tuvo la victoria cerca pero finalmente no pudo certificarla. Para el entrenador verdiblanco, otra semana más, el choque estuvo marcado por el perjuicio del colegiado del encuentro: "El punto es muy poco para nosotros. Un domingo más tuvimos que luchar contra fuerzas que no podemos. Este equipo demostró que tiene hombres dignos de este club. Hay que felicitar a los jugadores".
"Las cosas son tan claras que es triste. De seis puntos que merecíamos en los últimos dos partidos nos quitaron cinco. Lo que nos está pasando con los árbitros no es lo que se espera de esta Liga. Solo pedimos que las dudas no siempre favorezcan al contrario. Ya no hablamos de fútbol", enfatizaba de nuevo el argentino.
Insistía en el discurso Calderón, que muy damnificado, expresaba el sentir de los futbolistas: "En el vestuario hay mucha impotencia. Uno da la vida para darle alegrías a nuestra gente, pero no nos dejan. Tenemos que seguir así esperando que nos dejen ganar en el campo. Vemos como el equipo mejora partido a partido. Los jugadores siempre dan el máximo luchando para salvarse, más allá de que seamos el último", concluía.