El Consejo de Administración de Aguas de Cádiz se ha reunido durante la tarde de hoy para aprobar un acuerdo de autorización para iniciar acciones legales en vías de resolver la situación actual de "grave deterioro" en la que se encuentra el emisario de aguas pluviales de Santa María del Mar.
La empresa municipal ha acordado que iniciará cuantas acciones sean necesarias por vía administrativa y judicial para exigir responsabilidad a la Junta de Andalucía y a todos los agentes que han participado en el diseño, proyección y ejecución de un proyecto mal planteado y mal ejecutado desde un principio, según entiende la empresa. Por su parte, Aguas de Cádiz se compromete a seguir realizando los trabajos necesarios para tratar de paliar la situación de ruina funcional que presenta el aliviadero con el fin de evitar daños.
Los departamentos jurídicos de Aguas de Cádiz y Ayuntamiento de Cádiz ya se encontraban trabajando conjuntamente en plantear acciones legales que podrán materializarse tras el acuerdo llegado en el Consejo de Administración.
La presidenta de Aguas de Cádiz, Ana Fernández, asegura que esta decisión es el último recurso, y que la intención principal de la empresa es abordar la problemática desde un punto de vista técnico y trabajar en una solución conjunta con la Junta de Andalucía.
“Queremos hacer hincapié que el estado en el que se encuentra actualmente el emisario no es por falta de mantenimiento o por dejadez del Ayuntamiento, es debido al daño continuado que produce la acción de las mareas consecuencia de un proyecto mal concebido desde el inicio”. Ha puntualizado la presidenta.
Aguas de Cádiz, desde el primer momento, ha mostrado su interés por arreglar esta situación dialogando, y propone un anteproyecto que consistiría en crear una Berma que, además de recoger en su interior el colector, serviría de refuerzo a la Muralla y evitaría posibles socavones. Para llevar a cabo dicho proyecto la empresa municipal necesita la colaboración de la Junta de Andalucía.
