Estas son algunas de las causas que hacen a los conductores extranjeros más vulnerables ante la siniestralidad que los españoles, según el Real Automóvil Club de España (RACE), que presentó ayer los detalles de este estudio, del que se desprende que en los últimos cuatro años murieron en la carretera más de 800 conductores (830) extranjeros, es decir cerca de un 11% del total.
Un porcentaje que se sitúa hasta casi un 14% (13,8), si se incluyen los acompañantes.
Estas cifras, han explicado en rueda de prensa el director general del RACE, Ignacio Díaz-Pines, y el responsable del informe, Juan Antonio Sánchez-Trillo, reflejan la necesidad de adecuar la formación en origen de los conductores extranjeros a la realidad del tráfico en España, y de homogeneizar la normativa europea de tráfico que facilite una movilidad más segura.
Por ello, el club automovilístico ofrece ya un curso gratuito on-line para los conductores extranjeros que vayan a circular por España, donde se indica la documentación necesaria, la importancia del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil, aspectos relacionados con el permiso por puntos, alcoholemia y los límites de velocidad.
La dirección virtual a la que se tienen que dirigir es www.academiarace.com, pero además firmará acuerdos con clubes similares de otros países para que formen también a sus conductores que vayan a venir a España.
De momento, el RACE ya ha firmado un acuerdo con el Automóvil Club de Ecuador (Aneta), cuyo director general, Gorki Ovando, ha subrayado el papel de la formación para frenar la siniestralidad, que en el caso de sus compatriotas tiene una peculiaridad: más de la mitad de los ocupantes fallece en los accidentes mortales de ecuatorianos.
Una elevada tasa de siniestralidad de ocupantes fallecidos, que también contabilizan casi en la misma medida portugueses y rumanos.
Ante esta situación, el RACE propone que se impartan a los extranjeros residentes cursos gratuitos de adaptación a la circulación en España, y que primen criterios de seguridad vial que garanticen la equiparación del sistema de formación, evaluación y expedición de permisos con el modelo español en los convenios que suscriba el Ministerio de Asuntos Exteriores.
También solicita que en los acuerdos bilaterales se exprese la necesidad de equiparar el grado de conocimiento de las normas y costumbres en materia de seguridad vial ya que los niveles de uso del cinturón de seguridad, de los sistemas de retención infantil o el consumo de alcohol, mientras se conduce, difiere entre los extranjeros, dependiendo de su procedencia.
Asimismo, solicita mayor homogeneidad de normas de tráfico europeas y que se dicte una directiva europea para que se ejecuten las sanciones por infracciones de tráfico a escala europea, que impidan la impunidad de los conductores en el ámbito de la Unión.